Resumen: | El diagnóstico de la sífilis depende del cuadro clínico, la evaluación de las lesiones y de las pruebas serológicas. Las pruebas serológicas son treponémicas. Las pruebas no treponémicas son empleadas como tamizaje y las pruebas treponémicas, como confirmatorias. Se consideraba hasta hace pocos años tres pruebas treponémicas estándar, FTA-ABS (fluorescent treponemal antibody absorption test), FTA-ABS de doble coloración y MHA-TP (microhemaglutinación), las que usan al T. pallidum como antígeno y se basan en la detección de anticuerpos contra componentes treponémicos. Las pruebas treponémicas se usan para verificar la reactividad de las pruebas no treponémicas, pueden ser usadas para confirmar una sospecha con evidencia clínica de sífilis, como ocurre en la sífilis tardía, y cuando las pruebas no treponémicas son no reactivas. Pero, las pruebas treponémicas son técnicamente más difíciles y costosas que las pruebas no treponémicas y algunas veces no se pueden usar para monitorear el tratamiento. actualmente se realizan generalmente tres o más ensayos simultáneos, para el diagnóstico serológico de la sífilis. La tecnología de ADN recombinante ha permitido la purificación de antígenos treponémicos como el TpN15, TpN17, TpN47 y TmpA, su clonación y expresión, que han llevado al desarrollo de pruebas de anticuerpos treponémicos de nueva generación como el enzimoinmunoensayos (EIA), el Western blot (WB), y la reacción en cadena de la polimerasa (PCR). (AU)^ies.
|